domingo, 25 de noviembre de 2012

MI SEGUNDA FUCKIMIIO

Acá voy otra vez. Con mi gorrito supermolón para parar la fuga de calor de la coronilla. Qué biruji! ahora entiendo a mis amigos pelados, que cada vez son más por cierto (más pelados). Primero pasás por la analítica. Me pincharon tres veces. Venas finas. Me dejaron los brazos hechos un colador y con más moretones que Rocky. Empezamos bien. Luego, una espera de unas 4 horas para ver a la oncóloga. Mentras tanto, conversación de sala de espera:  una mujer  empezaba ese mismo día el tratamiento. A su lado, tres veteranas, contándole todo lo mal que la iba a pasar. Las noches sin dormir, los dolores, los vómitos. Hasta se sumó una abuela a contarle que tenía artrosis y más dolores. Yo, escuchando todo ésto, me temía que la pobre chica saliera corriendo o que tuviese toooodos los efectos secundarios por sugestión más que por causas reales. Le dije: "pues puede ser que no te pase nada. Yo la estoy llevando muy bien". Silencio incómodo. Miradas perforadoras y frase: "Ah, eso es que te pusieron una quimio muy suave". Espalda y listo. Desaparecí. ¿Qué puedo aportar si no tengo nada morboso que contar? ¡ABURRÍS! Así que me levanté con todo mi aburrimiento a cuesta y me fui a la sala de espera de los melenas hasta que me llamó la oncóloga: "Cmo sts? td bien, ah si,? qué bien, bno, q sigasí. Ads. ¡la próxima!!!!" Qué velocidad! Es cierto, estar bien aburre terriblemente, incluso a la oncóloga! Pues nada, me voy a dar la 2º quimio a ver si me vuelvo un poco más interesante. Tres horas y media de chute venenoso y lista! Qué puedo decir. Hasta hoy todo va bien, un poco de angustia la segunda noche pero res mes. Ah, bueno, se me bajó la tensión en la Inestable. Tuve que salir y pasar por delante de todos. Quién iba a decir que así iba a ser mi primer papelón en teatro. No sé si fue la quimio o el litro de toseína que me tomé para no toser  (la noche anterior había tenido que salir de Harcket en la Rambleta, por un ataque de tos. Espectadora ejemplar.) Mmmmmm...pues eso es todo, nada demasiado interesante no? Pues nada, que soy una aburrida. Aunque si quieren comentamos la cara de Calderón en el anuncio de Kinder Buenudo. (Siempre tengo un as en la manga para estos casos)

SIN PELOS NI EN LA LENGUA

Hay que cortar, ya no queda otra. Mechones en las manos, en la pila, en el sweater... Merche al ataque otra vez. Previa rapada, pasamos por un look berlinés que me mola bastante y al que volveré en cuanto recupere el poder (poder tener pelo en la cabeza). Al principio fue duro, sentir cómo te pasan la máquina, me sentí como en una peli (con lágrimasy todo), donde te cortan el pelo para quitarte la autoestima, la fuerza. Pero al final, me miré al espejo y me vi, sin pelos ni en la lengua. Y me gusté. No porque me guste estar rapada, sino porque pensé que el resultado iba a ser demoledor. Y paradójicamente, te sentís aún más fuerte. Porque la imagen te acompaña, te ayuda a marcar carácter. Los rasgos remarcados. El cuello al descubierto. La nuca potente. Ya no te queda nada más por perder y empezás a sentir cómo la balanza se invierte para empezar a ganar. Y aquí estoy, sorprendentemente orgullosa de mi calva, exponiéndome como nunca a la mirada ajena. Viviendo este estado como parte de un proceso en el que ya soy ganadora por goleada. Me redescubro y me reconozco. Eso si, los sweaters negros cuello de cisne, for get it. Soy el tío Lucas en persona (Fétido). Tanto joder con el tío Lucas y ahí está. Por suerte me ha hecho reír en mi infancia y sigue haciéndolo ahora, cada vez que me posee. Hubiese preferido identificarme con Natalie Portman pero sólo llegué al cisne negro...del sweater. No importa, en Zara te devuelven el dinero (que no la autoestima, pero bueno, algo es algo). Por cierto, el tío Lucas es el profesor de Regreso al futuro no? Hay que joderse!!!

martes, 13 de noviembre de 2012

EL DESMELENE

LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ

Ay, se me cayó uno. No. Son dos, tres, cuatro...Cuando empieza a caerse el pelo se te cae el alma al suelo. Intentás que cada pelo se te quede pegado, con moco si es necesario. Te mirás los hombros, la almohada, la pila del baño, buscando contabilizar la caída. Intentando determinar cuándo es el momento de pasar la podadora. Yo quiero estirarlo un poquito más ¡con el frío que hace!!!! Desde el principio supe que este proceso tenía determinados momentos heavy. El peor, sin dudas, es el principio, cuanto te enterás, intentás asimilarlo, los médicos te desinforman y entrás en el submundo de las quimioterapias, las medicinas alternativas y las decisiones difíciles.  Hasta que por fin, todo empieza a rodar. El otro, la operación. Este es puramente físico, quiero decir, si te duele o no. A mi me dolió un huevo y la mitad del otro, con lo cual ha sido jodido. El tema estético la verdad que me la sopla. Si hasta queda bonito! Love Marilyn Manson. La quimioterapia es otro hito importante pero que estoy llevando estupendamente. Ni náuseas, ni vómitos, ni cansancio ni ná de ná. Por ahora, claro. El 19 tengo la segunda sesión y ya veremos. Por lo pronto, la enfrento fuerte como un toro y con el ánimo arribísima. El pelo, otro tema. Claro que volverá a crecer, claro que es estética, pero quieras que no, es fuerte enfrentarte en el espejo con la enfermedad todos los días. ¡Sobretodo cuando ya no estás enferma!!! No me preocupa demasiado el tema estético de cara a los demás, tengo unos gorros que me solucionan la movida. El punto es el primer golpe de vista, el encuentro tan esperado con Kojac, con el tío Lucas (Fétido para los españoles). Tal vez termine amando mi pelada, como amo a mi Marilyn Manson, nunca se sabe. Por ahora sigo a la espera, pero en vez de contar las horas, cuento pelos. Uy, otro más, shit!

martes, 6 de noviembre de 2012

MI PRIMER FUCKIMIO

Del corte de pelo al chute de Poisson.


Merche llegó con las tijeras bien afiladas. Tenía claro a lo que venía, cortar por lo sano. Entró, se detuvo junto la barra con las piernas abiertas y las manos sobre las cartucheras a lo John Wayne y sin titubear, disparó. Dos kilos y medio de pelos y mechas volando por el aire. Eduardo Manos Tijeras un poroto al lado de ella. ¡Qué estilo, qué postura, qué bárbaro, che! Me dejó con la boca abierta y la nuca al aire. Para mi suma sorpresa, me gusta cómo me quedó. Hacía una semana que venía puteando con el tema del corte de pelo, sufriendo porque iba a parece La Raulito. Buscando gorros para poder tapar tamaño despropósito. Pero no, oye, que mola. Eso me levantó el ánimo. Así que después de juntar pelos durante una tarde entera hice algo que no había hecho nunca: colgué una foto mía en facebook. Qué subidón! Exitazo total. A ver si cuando cuelgue la foto del Tío Lucas tienen cojones (risas enlatadas).
El 29 de octubre me levanté, intenté peinarme el nido de carancho de la cabeza sin éxito y salí de lo más despeinada hacia el chute box. Mi primera sesión de quimio me esperaba. Entré en una habitación con un montón de sillones rojos ocupados por personas enchufadas a un gotero. Me sentía en esa escena de "Wally", sólo que entre todos armábamos solo uno de los gordos come-bollos de la peli. Estuve cinco horas chupando mierda por la vena y, por suerte, no tuve ningún efecto ni reacción negativa. Con el culo plano pero contenta volví a casa cargadita de sangre ACME dispuesta a beberme hasta el agua de los floreros para limpiar un poco el organismo de tanto poisson. Hoy hace ya una semana y, sacando el virus de gastroenteritis que se apoderó de mi casa (y de mi baño), estoy fenomenal. No sé si es por todos lo brebajes naturales que estoy bebiendo, o por la sesión pre y post de acupuntura o  simplemente porque es la primera sesión, pero noto que al quitarme la teta, cortarme el pelo y darme el primer merdachute, me están creciendo unos huevos casi tan grandes como mis ovarios.   Eso sí, sin pelos.